San Alejo nació en la ciudad de Roma en el siglo IV fue hijo de Eufemiano y Agaleno, y los mismos le dieron a él una honorable mujer para que se convirtiera en su esposa, pero lo que no sabían es que su hijo no deseaba estar casado así que esa misma noche de bodas debió hablar con la que era su esposa, y tomo la decisión de decirle que él no podía estar casado porque debía dedicar su vida a impartir la fe, fue así que esa misma noche la abandono y dejo atrás todos los lujos con los cuales vivía y paso de ser pudiente a ser un simple mendigo en la calle.
Uso el dinero que le correspondía como herencia a cuidar de los pobres y compartir todo con ellos incluso hasta los cuidaba como si fuera médico y a través de eso hablaba de Dios y de la fe a las personas que se encontraban en la calle y requerían de ayuda de cualquier tipo.
Índice de Contenidos
¿Cuál es la oración a San Alejo?
¡Oh, encanto de la nobleza romana e indiscutible amador
De la indigencia y deshonra de Cristo!
¡Oh, Alejo santo!, que en la ternura de tu mocedad,
Por cumplir a la iluminación del Señor,
Abandonaste a tu cónyuge y surgiste como otro Abraham
Del hogar de tus papás, y teniendo disperso lo que cargabas con los pobres,
Fuiste como indigente y menesteroso tantos años ignorado y desfavorecido entre los hombres.
Tú estuviste muy placentero y auxiliado de la Virgen María,
Nuestra Soberana y señora, y escapando de las lisonjas de los hombres,
Retornaste por inclinación de Dios al hogar de tus padres
Que por su brío habías abandonado,
Para proporcionarnos muestra de humildad, de aguante, de angustia y perseverancia,
Y para triunfar de ti y del universo con una especie de triunfo tan desconocido y tan famoso.
Pues, ¡oh, santo beato!
Adinerado y pobre, ilustre y obediente, comprometido y puro,
Sollozado de tus padres, infamado de tus criados,
Repudiado de los hombres e íntegro de los ángeles,
Desanimado en el suelo y exaltado en el cielo,
Yo te imploro, San Alejo,
Que por tus méritos y preces
Yo trascienda del Señor la integridad de la perfecta pureza,
De acatamiento, de depreciación de todas las cosas temporales,
Y gracia para ser como hombre infrecuente de su país,
E inexplorado y muerto al mundo.
Amén.
¿Qué se le pide a San Alejo en su oración?
Las oraciones a San Alejo son reconocidas como forma de sacar de tu vida todo lo malo, ya sean enfermedades, enemigos, envidias o males. Por tanto, es una oración de luz como las de San Patricio o San Pancracio que a su vez atrae lo bueno a tu vida como San Cono.