La Virgen de Juquila, también conocida como Nuestra Señora Inmaculada Virgen de Juquila es una festividad mariana de la Virgen María y está en la advocación de la Limpia y Pura Concepción con el título de Nuestra Señora Inmaculada Virgen de Juquila. Este título viene de la población que cuenta con ese mismo nombre. Es la patrona de Oaxaca.
La Virgen de Juquila tiene su santuario que se encuentra ubicado en la ciudad de Santa Catarina Juquila, en el estado de Oaxaca, en México, en donde es venerada. Su festividad se celebra el 8 de diciembre, y ahí se realizan bailes tradicionales de la zona con muchos colores y música.
Su imagen es representada de la siguiente forma: Posee una tercia de vara de unos 30 centímetros y el grueso de 2 dedos, es decir 4 centímetros y 15 centímetros de ancho del vestido, ella viste una túnica y esta cae en el manto que va desde los hombros y se acomoda bajo el brazo izquierdo. Su cabello se alarga sobre su ropaje, sus manos están unidas ante el pecho, los ojos están ligeramente inclinados y es de tez morena.
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¿Cuál es la historia de la Virgen de Juquila?
En el año de 1552, un fraile de origen dominicano llamado Jordán de Santa Catalina llegó a Oaxaca. Jordán trajo con él desde España una pequeña imagen tallada de la Virgen y tenía su servicio un joven que era nativo de Amialtepec. Al regresar al pueblo donde estaba el fraile, este le regaló la imagen de la Virgen de unos 30 centímetros.
Durante mucho tiempo, es decir, años, la Virgen y su imagen es visto como un objeto de veneración para la gente de Amialtepec y los pueblos que se encontraban cero. Esto se da porque se decía que tenía fama de conceder las peticiones. Ella se hizo tan conocida que el año de 1633 un sacerdote de Juquila, llamado don Jacinto Escudero, pidió que se llevara de la casa rústica a una iglesia igual de rústica.
Poco después ocurrió un incendio devastador a causa de la quema de los bosques para preparar los campos para la siembra. Por el fuerte viento que se hacía allí, lo llevó hasta el pueblo y todo fue destruido, incluida la iglesia hecha de zacate y cañuela. Pero de forma milagrosa, la imagen de la Virgen no se vio afectada con los vestidos y cabello intactos, sólo el rostro estaba ennegrecido y contaba con ciertas ampollas.
Se intentó retocar, pero fue imposible hacerlo. Por lo que los devotos entendieron que ella deseaba tomar el color moreno de esta etnia. Es por ello que la Virgen de Juquila es considerada una virgen milagrosa, que atrajo la fama y el dinero a Amialtepec desde que don Jacinto decidió llevarla a Juquila.
Un tiempo después se desapareció de la iglesia y se encontró nuevamente en Amialtepec. Para las personas de Juquila se dice que ese acto fue un robo, pero para las personas de Amialtepec se dice que fue un milagro. Por segunda vez el sacerdote fue por la Virgen y regresó con ella a Juquila, pero de nuevo regresó a Amialtepec. Cuando esto pasó por tercera vez la Virgen se quedó en Amialtepec. Hasta el año de 1719 fue que el obispo firmó un edicto, que se trasladó definitivamente a Juquila de donde nunca más salió.
Oración para el trabajo
Virgen de Juquila, intercesora en todo problema difícil, consígueme un trabajo en el que me realice como humano, y que a mi familia no le falte lo suficiente en ningún aspecto de la vida.
Que lo conserve a pesar de las circunstancias y personas adversas. Que en él progrese, mejorando siempre mi calidad y gozando de salud y fuerzas.
Y que día a día trate de ser útil a cuantos me rodean. Asocio tu intersección a la Sagrada familia, de la cual eres pariente y prometo difundir tu devoción como expresión de mi gratitud a tus favores.
Amén.
Oración de los esposos y para la familia
Señor: Haz de nuestro hogar un sitio de Tu amor que no haya injuria, porque Tú nos das comprensión. Que no haya amargura porque Tú nos bendices.
Que no haya egoísmos porque Tú nos alientas a dar. Que no haya rencor porque Tú nos das el perdón.
Que no haya abandono porque Tú estás con nosotros. Que sepamos marchar hacia Tí en nuestro diario vivir.
Que cada mañana amanezca un día más de entrega y sacrificio. Que cada noche nos encuentres con más amor de esposos. Haz Señor de nuestras vidas que quisiste unir, una página llena de tí.
Haz Señor de nuestros hijos lo que tú anhelas; ayúdanos a educar, a orientar por tu camino. Que nos esforcemos en el consuelo mutuo.
Que hagamos del amor un motivo para amarte más. Que demos lo mejor de nosotros para ser felices en el hogar.
Que cuando amanezca el gran día de ir a tu encuentro, nos concedas el hallarnos para siempre en tí.
Amén.
Oración para los casos difíciles
Nuestra Señora de Juquila
Limpia y Pura Concepción
Reina de los Cielos, Madre de Dios,
querida patroncita prodigiosa,
que siempre acojas con bondad
las súplicas que hasta ti llegan,
y son incontables los milagros
que se obran por tu intercesión.
Madre mía de Juquilita,
Tú que sanas enfermedades
y das consuelo a los más necesitados,
Tú que proteges de peligros y males
y nos libras de aflicciones,
Tú que nunca nos abandonas
y eres nuestra gran esperanza,
escucha mis sentidas peticiones
que hoy te hago con fe y confianza:
Madre Querida, Virgen de Juquila,
Virgen de nuestra esperanza,
tuya es nuestra vida.
Cuidanos de todo mal.
Si en este mundo de injusticias,
de miseria y pecado,
ves que nuestra vida se turba,
no nos abandones.
Madre Querida, protege a los peregrinos,
acompañamos por todos los caminos,
vela por los pobres sin sustento
y el pan que se les quita retribúyeselos.
Acompáñanos en toda nuestra vida
y libéranos de todo tipo de pecado.
Amén.
¡Virgencita, no nos abandones!
Doy gracias a la Virgen de Juquila,
por los favores recibidos.
Así sea.
Pedir con muchísima fe tres deseos,
uno de negocio o trabajo, y dos difíciles o imposibles.
Rezar nueve Ave Marías.
Hacer la oración y los rezos durante nueve días seguidos.