Las plegarias en busca de un milagro pueden ser altamente efectivas. Pero entre las más comunes están las oraciones a San Gabriel Arcángel. Es por ello que te traemos un par de oraciones para este reconocido Arcángel.
Parte de los siete arcángeles de Dios, San Gabriel es de los más poderosos y conocidos ángeles del señor. Dado sus grandes dotes y cualidades milagrosas, muchas personas ven en San Gabriel una vía confiable para obtener un milagro.
Ya sea que esperes un milagro económico, amoroso, de salud o espiritual, San Gabriel escucha a todos aquellos devotos y fieles que oran con fe y convicción pura. Sin limitarse o juzgar, el Arcángel escucha nuestras plegarias cuando más lo necesitamos.
No obstante, no hay que abusar del poder milagroso del Arcángel Gabriel. Muchas veces se busca ayuda o socorro en su figura y espíritu para cualquier ocasión, pero este suele ser más efectivo en casos y situaciones difíciles de nuestra vida.
Te dejamos unas oraciones poderosas al Arcángel Gabriel para pedir por un milagro.
Índice de Contenidos
Oración al Arcángel San Gabriel
Bendito ser de luz, embajador de Dios Padre, mensajero de la esperanza, santo Ángel del Señor, sé tú el mensajero del milagro que espero, sé tú el que solucione mis tristezas y amarguras.
Trae hasta mí el amor de mi Padre el Señor nuestro Dios, para que alivie mis carencias sentimentales, mis necesidades físicas y materiales, para prodigarme la compasión del Señor.
¡Oh Ángel del Señor! Dame el amor de mi Dios.
¡Oh Ángel del Señor!, calma mis penas.
¡Oh Ángel del Señor!, tráeme consuelo.
¡Oh Ángel del Señor!, báñame de luz.
¡Oh Ángel del Señor!, cura mi cuerpo.
¡Oh Ángel del Señor!, cura mi corazón.
¡Oh Ángel del Señor!, cura mi alma.
¡Oh Ángel del Señor!, trae hasta mí el milagro, las gracias y bendiciones que tanto espero:
Porque tú eres el emisario del Señor mi Dios, tú eres su alabanza, tú compartes con nosotros la creación. ¡Oh Ángel del Señor, fortaleza de Dios! En esta hora aciaga trae los dones del cielo a la tierra y permite que se produzca el milagro.
Arcángel San Gabriel, no demores en llevar mi ruego ante su Sagrada Presencia, yo (di tu nombre) te suplico le transmitas mi llamada de auxilio y hagas lo posible para que pueda recibir el milagro que tanto preciso en mi vida y así alcanzar la felicidad terrena que tanto deseo.
Tú que eres el portador de las buenas noticias y eres el protector de los hogares, haz que en breve vea solucionados mis problemas.
San Gabriel, Arcángel de la pureza, te amo y te bendigo por todo lo que me das, y te doy las gracias por lo que significas para mí, no dejes de guiar los pasos que doy, guarda mis caminos y acompáñame en mi vida que tu protección, patrocinio e intercesión nunca se alejen de mí, para que sea una buena persona aún en los peores momentos.
Yo (di nuevamente tu nombre) te lo agradeceré eternamente y junto a Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo y la Santísima Virgen María, que es reina tuya y mía, siempre te llevaré en mi corazón. Así sea.
Esta oración la puedes hacer tres veces al día durante una semana. Preferiblemente en compañía de una vela blanca. Pero lo más importante es que eleves tus palabras con mucha fe y absoluta confianza en San Gabriel.
Oración al Arcángel San Gabriel para casos difíciles
Tal vez el milagro que buscas no es de índole personal; sino por un bien mayor y colectivo. Un milagro en el cual el prójimo también sale beneficiado. A pesar de que todos estamos expuestos a vivir situaciones complejas y duras en nuestra vida, es en estos momentos donde se revela la pureza de nuestros corazones.
Pedir al Arcángel San Gabriel por el bien de las personas y el nuestro incluido es de los mayores milagros que podemos buscar. Por eso te dejamos una oración para milagros dirigida a San Gabriel.
Arcángel Gabriel: embajador de Dios Padre, mensajero de la esperanza, santo Ángel del Señor, sé tú el mensajero del milagro que espero, sé tú el que solucione mis tristezas y amarguras.
Trae hasta mí el amor de mi Padre el Señor nuestro Dios, para que alivie mis carencias sentimentales, mis necesidades físicas y materiales, para prodigarme la compasión del Señor. Alivia mi sensación de abandono y soledad, aplaca mi temor, cura mis miedos, mitiga mi angustia.
¡Oh Ángel del Señor! Dame el amor de mi Dios.
¡Oh Ángel del Señor!, calma mis penas.
¡Oh Ángel del Señor!, tráeme consuelo.
¡Oh Ángel del Señor!, báñame de luz.
¡Oh Ángel del Señor!, cura mi cuerpo.
¡Oh Ángel del Señor!, cura mi corazón.
¡Oh Ángel del Señor!, cura mi alma.
¡Oh Ángel del Señor!, trae hasta mí el milagro, las gracias y bendiciones que tanto espero:
(En este púnto de la oración debes pedir con fe lo que tanto deseas).
Porque tú eres el emisario del Señor mi Dios, tú eres su alabanza, tú compartes con nosotros la creación. ¡Oh Ángel del Señor, fortaleza de Dios! En esta hora aciaga trae los dones del cielo a la tierra y permite que se produzca el milagro.
Arcángel San Gabriel, embajador de Dios Padre, no demores en llevar mi ruego ante su Sagrada Presencia, yo (di tu nombre) te suplico le transmitas mi llamada de auxilio y hagas lo posible para que pueda recibir el milagro que tanto preciso en mi vida y así alcanzar la felicidad terrena que tanto deseo.
Tú que eres el portador de las buenas noticias y eres el protector de los hogares, haz que en breve vea solucionados mis problemas.
San Gabriel, Arcángel de la pureza, te amo y te bendigo por todo lo que me das, y te doy las gracias por lo que significas para mí, no dejes de guiar los pasos que doy, guarda mis caminos y acompáñame en mi vida que tu protección, patrocinio e intercesión nunca se alejen de mí, para que sea una buena persona aún en los peores momentos.
Yo (di nuevamente tu nombre) te lo agradeceré eternamente y junto a Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo y la Santísima Virgen María, que es reina tuya y mía, siempre te llevaré en mi corazón. Así sea.
Él te escuchará si tus palabras son sentidas de todo corazón y libre de egoísmo. Mantén siempre la fe y la devoción a este santo y más temprano que tarde llegará un milagro a tu vida.
Esta oración la puedes llevar a cabo tres días seguidos, también en compañía de una vela blanca. Seguidamente reza tres padres nuestros. Sé paciente y no dejes que el mal en tu vida haga tambalear tu fe.