El sacramento del bautizo es por el que nos liberamos del pecado y nos consagramos como hijos de nuestro señor Dios; entramos a la iglesia y por tanto a la familia de Dios, para ser participes de su comunidad cristiana.
Este ritual cristiano de iniciación con el que se comienza la educación en la fe católica y se lleva a cabo en la iglesia; consiste en sumergir al niño en el agua bendita, para que salga purificado con el espíritu de Dios. Es el sacramento del nacimiento del hombre a la vida espiritual, con el acto del agua y la invocación de la santísima trinidad, es decir del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.
Durante la ceremonia del bautizo se realizan diferentes oraciones que forman parte de este ritual entre las que se destaca la liturgia del sacramento, vamos a verlas a continuación.
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¿Qué oraciones se rezan en el bautizo?
Bendición del agua e invocación a Dios.
Queridos hermanos:
Oremos a Dios todopoderoso
para que, por medio del agua y del Espíritu Santo,
conceda la Vida nueva a estos niños.Bendito seas Dios, Padre todopoderoso, que hiciste el agua para purificarnos y darnos la vida.
Padre Amado
Has traído la dicha a mi vida
Me has dado la oportunidad de formar una familia
Has creído en mí y en (NOMBRE DE TU PAREJA) para criar a una persona
Te prometemos Padre que la llevaremos por tu camino
Tú eres el bien y deseamos que (NOMBRE DE TU HIJO) esté a tu lado
Nunca nos has defraudado, siempre nos has amado
Por eso enseñaremos a nuestro pequeño a amarte como nosotros lo hacemos
Llena su camino de bienestar y amor
Bríndale sabiduría e inteligencia
Hazlo un niño de bien
Y nunca lo abandones Mi Señor
Amén
¿Qué conseguimos al ser bautizados y rezar?
Cuando recibimos el sacramento del bautizo ocurren tres cosas importantísimas para la fe:
- Primero, somos perdonados por el pecado original, el cual fue cometido por Adán y Eva por desobedecer a nuestro señor, desde entonces todos los seres nacemos con el pecado original, al ser bautizado el ser queda totalmente limpio.
- Segundo, cuando lo recibimos nos convertimos en hijos de Dios, pues este sacramento es como un nuevo nacimiento, donde nuestro señor va estar siempre con nosotros.
- Y tercero, luego pasamos a ser parte de una comunidad cristiana, por lo que es una ceremonia espiritual para convertirnos en hijos de Dios y formar parte de su iglesia.
También te recomiendo el Ave María, es la oración tradicional de los creyentes católicos a la Virgen María, para que esta como la madre de Jesús interceda por nosotros seres pecadores ante nuestro señor Dios, lo que constituye un gran apoyo espiritual en momentos difíciles o para rezarla todos los días y afianzar nuestra fe por medio de la oración.