En México, el propósito de convertir el hogar en un aula virtual es un reto que enfrentan millones de madres profesoras que buscan ejercer la función docente desde sus casas. Esta nueva realidad académica prevista desde la cuarentena por el coronavirus ha revelado el esfuerzo titánico de madres responsables de generar aprendizaje a sus hijos. Miles de familias han enfrentado un gran compromiso al convertirse en un equipo de trabajo pedagógico con un solo fin. Sin importar el resultado, el compromiso de estas madres como profesoras es evidente, pues cada una se ha entregado en bregar para que sus hijos alcancen un aprendizaje significativo. Esta realidad nos muestra la perseverancia y la capacidad de madres profesoras para lograr un propósito común.
1. ¿Por qué las madres son el reto de la enseñanza?
La enseñanza de las madres es un reto que todos los maestros deberían considerar. La relación mamá-maestro es un tema difícil de abordar, especialmente cuando se trata de establecer límites y diferencias. Muchos maestros luchan contra el trabajo cansado que implica enseñar a los niños. La presencia de padres entrometidos, especialmente madres, puede complicar el proceso aún más.
Sin embargo, las madres son esencialmente una fuente de enriquecimiento educativo. Son claves en entender mejor la movilidad social ejercida por los adolescentes en clase. El uso de una competencia emocional y la educación cultural ayudarán a los maestros a involucrar a los estudiantes de forma más efectiva. La capacidad de comprender los efectos de la vida en casa en la práctica de los estudiantes ayudará a los maestros a diseñar las necesidades educativas individuales de cada niño.
Por esta razón, los maestros deben comprometerse en un diálogo abierto con la madre, con el fin de comprender de dónde provienen los estudiantes. El compromiso de los maestros para adaptar críticamente sus prácticas educativas a la sociedad, cultura y antecedentes de los niños es lo que ayudará a los niños a sentirse realmente valorados y entendidos. Esto es especialmente importante cuando las madres demuestran un interés en la enseñanza de sus hijos.
Los maestros deben tener cuidado con tener una relación profesional estrecha pero abierta a sugerir y sugerir posibles mejoras para ayudar a los estudiantes. Esto incluye recurrir a materiales de alta calidad y ofrecer consejos y dirección educativa para mejorar y personalizar el currículum de los niños. Esto crea un ambiente de consenso en el que los padres y maestros trabajan juntos para maximizar el potencial de todos los niños en el aula.
2. La dualidad de las madres como profesoras
Muchas madres tienen el deseo de equilibrar su vida familiar y profesional, y en los últimos años, la profesión de la enseñanza se ha convertido en una excelente opción para lograr este propósito. Sin embargo, hay una cosa que muchas madres como profesoras enfrentan cotidianamente, y se trata de la dualidad de sus roles como madre y profesora.
Es una sensación agotadora tratar de balancear su vida laboral y familiar sin caer en las exigencias a las que se les somete como maestras. El hecho de que tengan la responsabilidad y el compromiso compartidos con su familia y los estudiantes es un doble riesgo que no todos los profesionales pueden soportar.
Para ayudar a las madres que han elegido enseñar como su trabajo, es fundamental que sepan cómo gestionar sus tareas para que se sientan cómodas con su dualidad parental y profesional. Algunas recomendaciones básicas son: establecer límites claros, decidir cuando delegar tareas, buscar un apoyo emocional que les permita enfrentar los desafíos y compartir sus experiencias con otras madres profesoras. Si bien tomar estos pasos les ayudará a sentir que pueden lidiar con todos los aspectos de su vida, no estarán exentas de estrés.
3. ¿Cómo logran madres y profesoras equilibrar aproximadamente sus roles?
Apartar Horarios – Una forma eficaz de lograr que las madres y las profesoras equilibren sus roles es apartando bloques de tiempo durante el número de horas de trabajo de cada una por semana. Esto les permite organizar sus actividades planear con anticipación y asegurar un equilibrio entre el trabajo y el resto de sus responsabilidades. Esta táctica está especialmente útil para aquellas que tienen un número restringido de horas laborales. Al trabajar en horarios controlados, las madres y las profesoras pueden optimizar mejor su tiempo, minimizar su estrés y dedicar suficiente tiempo a sus hijos y a sus alumnos.
Organizar Agenda – Organizar una agenda eficaz es otra herramienta fundamental para lograr un equilibrio entre sus roles. La agenda debe incluir una lista de tareas y responsabilidades diarias y semanales, pero también un control flexible, para reactuar rápidamente a los cambios inesperados en el trabajo o en la casa. Esto les permite monitorear sus actividades cotidianas, apoyarse mutuamente en sus tareas ya sea compartiendo recursos, contactos o simplemente apoyándose uno al otro. Esto les ayudará a cumplir sus obligaciones en tiempo y forma. Esta estrategia también puede ser de gran ayuda para planificar con anticipación actividades de ocio o de entretenimiento.
Establecer prioridades – Establecer prioridades también es una manera ideal para lograr un equilibrio en sus roles. Las madres y las profesoras deben decidir cuáles son las actividades y las tareas más importantes, aquellas que deben priorizar para garantizar que todo esté bajo control. Esta estrategia también les ayudará a cumplir con sus metas y responsabilidades. Una vez que se han establecido las prioridades, estas deben ser respetadas para mantener un orden y equilibrio en los roles.
4. Los desafíos de madres como profesoras en tiempos de pandemia
Barrer con los miedos. Para muchas madres profesoras, la pandemia ha supuesto un cambio radical en sus vidas. Encargadas de cuidar a sus hijos, además de tener que hacer frente a la responsabilidad de enseñar de forma remota, la carga de trabajo se ha multiplicado. Trabajar desde casa, al lado de los pequeños, puede resultar una tarea ardua.
En este sentido, es necesario reprogramar la agenda de forma solidaria, lo que significa asumir un nuevo patrón de trabajo compartido. Establecer límites horarios para hacer frente a los distintos trabajos puede resultar importante, respetando los distintos tiempos necesarios para dedicar a los hijos, a trabajar o a descansar.
Por ello, resulta importante abrir espacios tanto materiales como físicos creando zonas de trabajo separadas en lo posible de donde estén los niños. También, establecer nuevas relaciones entre familiares para ayudarse mutuamente con esta nueva rutina es vital. Esto puede incluir a familiares lejanos que puedan cubrir retos educacionales o de tiempo durante la semana, y ayudar así a soltar el estrés de todos.
5. La influencia de las madres como profesoras en el desempeño de los estudiantes
Los estudiantes con madres profesoras son más propensos a tener éxito en sus estudios. Esto se debe a que estas madres conocen los programas educativos de primera mano y están equipadas para ayudar a sus hijos a comprometerse y excelentes resultados académicos. Como padres, también son conscientes de la importancia de estudiar para lograr los objetivos académicos de sus hijos. Esta situación se desarrolla de la siguiente manera:
- Las madres profesoras pueden ayudar a crear planes de estudio que se adapten a la disponibilidad y al nivel académico de sus hijos.
- Los estudiantes tendrán más facilidades para estudiar mejor, ya que sus madres pueden comprender mejor sus situaciones y proporcionarles el tiempo y el apoyo necesarios.
- Reciben un feedback de calidad de sus madres profesoras que los ayuda a esforzarse alentando el trabajo duro y la creatividad.
Además, las madres profesoras tienen una mentalidad organizativa y conocimientos académicos actualizados. Ellas son conscientes de cómo funcionan los programas académicos y pueden inculcar disciplina y patriotismo educativo entre todos sus hijos. Esto los anima para comprender mejor el contenido académico, desarrollando una visión más amplia y razonada. Esto significa que las madres profesoras los ayuda a convertirse en estudiantes responsables, cumpliendo con los objetivos académicos y otros.
Así es como un entorno familiar favorable contribuye al éxito académico de los hijos. Las madres profesoras cuentan con ideas frescas para que los programas educativos mejoren. Están comprometidas para incentivar y aumentar la motivación en la vida académica de sus hijos. Y, sobre todo, están ahí para recompensar, reforzar y ayudar a los estudiantes a mejorar, desarrollar habilidades y adquirir conocimientos, habilidades y valores que les permitan alcanzar sus metas académicas.
6. Las iniciativas que existen para ayudar a madres/profesoras
Las iniciativas legislativas dirigidas a madres y profesoras pueden ser mediadas por el gobierno y por entidades fuera de él. Estas iniciativas suelen tener el objetivo de mejorar la calidad de vida y la seguridad laboral para mujeres y profesoras.
Legislación Gubernamental: a nivel local, estatal y nacional, el gobierno a menudo promulga leyes para prevenir la discriminación laboral basada en el género, promover límites de trabajo equitativos para los empleadores y garantizar el derecho de ambos cónyuges a recibir beneficios de seguridad social a través del matrimonio. Estas leyes también protegen a las madres que trabajan, especialmente aquellas que amamantan a sus hijos.
Iniciativas de ONGs: además de la legislación gubernamental, existen varias iniciativas ofrecidas por organizaciones no gubernamentales (ONGs) para apoyar a las mujeres embarazadas y todos los días los padres. Estas iniciativas promueven la igualdad en términos salariales, seguros de salud adecuados, descansos justos, formación y educación para el empleo, así como alojamiento temporal para aquellas que no tienen hogar.
Iniciativas Gubernamentales: algunos gobiernos ofrecen iniciativas específicas para madres o profesoras. Estas iniciativas incluyen programas de capacitación para el empleo, ayudas financieras para el crecimiento profesional, programas de educación para el cuidado infantil y descuentos en garajes para coches y otros bienes materiales.
7. ¿Cómo las madres pueden motivar a los estudiantes para una mejor educación?
Motivar a los estudiantes con el amor y la comprensión: Para animar a sus hijos a la educación, los padres deben comenzar mostrando un gran amor y comprensión por ellos. La motivación no se basa en castigos o amenazas, sino más bien en un entendimiento de que la educación es fundamental para el futuro de sus hijos. Mostrarles el valor de la educación y explicarles por qué es importante puede motivarlos de manera positiva a comprometerse con la educación. Los padres también necesitan animar a sus hijos a seguir adelante con la educación a pesar de los desafíos, ofrecer palabras de aliento para que aumente su autoestima y promover un ambiente de respeto y apoyo.
Expresar el orgullo de la educación: Los padres también pueden mostrar orgullo a sus hijos por sus logros educativos. Esto puede ser en forma de abrazos o palabras de aliento, o incluso recompensas tangibles, como los coleccionables favoritos de sus hijos. Tales medidas motivarán a sus hijos a seguir progresando en los estudios. También pueden ofrecer recompensas para los resultados académicos notables y halagos para los esfuerzos realizados. Por ejemplo, pueden motivar a su hijo a ganar un nuevo trofeo ofreciendo una pequeña recompensa como un juguete favorito.
Enseñe a sus hijos hábitos de estudio constructivos: La motivación no es algo que se construye en un día. Requiere un proceso prolongado que los padres deben administrar con paciencia. La forma más efectiva de asegurar que los estudiantes sigan siendo motivados es ayudarlos a establecer hábitos de estudio saludables. Esto significa establecer horarios de estudio consistentes, asignar tareas adecuadas en términos de cantidad y dificultad, y mantenerlos comprometidos con la educación a través de charlas regulares. Los padres también deben estar al pendiente de los intereses y habilidades específicas de sus hijos para habilitar un entorno educativo relevante que los motive a estudiar.
Los madres son una fuerza clave para guiar el futuro de nuestro sistema educativo. La clave para su éxito es encontrar el equilibrio entre ambos papeles, de modo que sus enseñanzas sean aprovechadas por completo. La movilización de los padres para apoyar a sus hijos también es esencial para ofrecer una excelente educación. Este nuevo desafío plantea un futuro prometedor para nuestros niños, y con programas adecuados, tanto madres como profesores pueden hacer de la educación de nuestros hijos una experiencia verdaderamente única.